Una foto de la cena que compartieron este domingo Alberto Fernández y Evo Morales en La Quiaca causó polémica porque lejos estuvieron de respetar las medidas para prevenir los contagios de coronavirus, algo que se repitió en el acto de este lunes en el que el ex presidente regresó a Bolivia.

En las redes sociales se viralizó rápidamente la imagen de la cena, donde Fernández y Morales cenan en una apretada mesa junto a más de diez personas en un lugar cerrado, sin distancia y tampoco barbijos.

El presidente argentino, que arribó a Jujuy luego de participar de la asunción de Luis Arce, estuvo acompañado por los ministros Wado de Pedro y Elizabeth Gómez Alcorta; los funcionarios Gustavo Béliz, Juan Pablo Biondi y Julio Vitobello; y los legisladores Jorge Taiana y Eduardo Valdes, entre otros. Junto a Evo estaban su ex vice Álvaro García Linera y otras personas.

Como se sabe, las reuniones sociales de más de diez personas no están en Argentina, mucho menos si se realizan en lugares cerrados y sin cumplir los protocolos como distanciamiento y barbijo.

Télam

La falta de cuidados se reiteró este lunes durante el acto que se realizó en el paso internacional de La Quiaca, antes de que Evo cruce a Villazón donde fue recibido por una multitud.

Tras el acto Alberto le dio la mano a Evo y se estrecharon en un abrazo, ambos sin barbijo. Tras caminar varios metros, el presidente argentino se colocó el tapabocas pero volvio a darle la mano y abrazar a Morales, García Linera y toda su comitiva. También a dos representantes de los mineros bolivianos que le regalaron un casco.